domingo, 15 de octubre de 2017

Zaragoza, ¿esto es lo que quieres ser? #Pilar2017

Hoy, me voy a salir un poco de la temática de este blog, si bien, este artículo lo voy a relacionar con el mundo de la empresa, en un sector, en el que hasta hace no mucho no existía el "todo vale"

El sector sobre el que versará este post, es sobre el toro y la reciente Feria del Pilar 2017, exitosa en público, posiblemente triunfal en lo económico, pero donde el verdadero sabor añejo, la verdad, la defensa de la fiesta, el ritual, la seriedad se ha perdido por completo. Qué pena...

No cabe la menor duda, de que los Festejos Populares en Zaragoza ayudan y mucho a solventar y aliviar la economía de las empresas que dirigen los destinos de la plaza, pero de ahí, a que esto sea la base de una Feria, creo que va un mundo. Cierto es que la plaza pasó por unos momentos de penumbra, casi de abandono, pero no menos cierto, es que también tuvo sus años de gloria, donde la seriedad del público y lo que se exigía a toreros y ganaderos, está a años luz de lo actual. Debemos acordarnos de todo... 



Por supuesto, que las empresas están para ganar dinero como así defienden algunos de los periodistas (o comentaristas) que informan en nuestra cadena pública aragonesa, pero en el toro, "no todo vale"... o al menos, antes no todo valía, y así lo denunciaban los críticos y periodistas del sector.

Soy persona de símiles y lleva uno que me ronda por la cabeza durante estos días... ¿Se imaginan que la Iglesia incluyera monólogos de humor en sus sermones para que la gente volviese a ir a las misas? Manos a la cabeza... ¿verdad? Pues es lo que estamos (están) haciendo en Zaragoza, introducir monólogos de risa que llenan la plaza pero que hacen perder el verdadero significado de la fiesta en nuestra ciudad.

No sé los números reales de la empresa Simón Casas Production en esta feria, pero a tenor del público asistente, y más o menos estudiando el caché de los festejos, el resultado no habrá sido malo. ¿Saben que ocurre? Qué en una empresa de este tipo, además de ser un experto en números y en gestión empresarial, hay que defender una fiesta que poco a poco se está muriendo. Al hilo de esto, no se equivoquen, muere no por las manifestaciones antitaurinas numerosas en mayor o menor medida, dado que poco o nulo daño hacen a la fiesta, sino por el sendero peligroso que está siendo guiada por los dirigentes de las empresas.

No estamos ante un ejemplo de gestión de empresa corriente. Estamos tratando una gestión empresarial que toca el sentimiento del aficionado (además del bolsillo), y que resulta, que ahora en Zaragoza se está basando en unos cimientos nada sólidos, recordando siempre como base donde estábamos cuatro años.

Estoy convencido, soy consciente, no me cabe la menor duda, que saben que algo se ha hecho mal, que los tendidos se han convertido en un ritual de comida, café, cubatas y fiesta, y al final, esto no deja de ser pan para hoy y hambre para mañana. 

Ójala Nacho Lloret, gerente de la empresa lea estas palabras, y aunque no públicamente, algún día me diga que tenía razón, o al menos, me de "chance" para comentarlo. Ahora estará feliz, contento, orgulloso, porque como empresa los números han salido, pero él mejor que nadie sabe, que los monólogos de risa no son buenos ni en la iglesia, ni en los toros.

Esperando y deseando que algún día esto cambie, felicitando por la gestión económica empresarial de la plaza, e incidiendo en que ser empresario en este sector requiere algo más, nos emplazamos al año que viene con la esperanza e ilusión de poder volver a sentir emoción en el tendido.

P.D. Un artículo que estoy seguro firmarían muchos aficionados, incluso algunos, que cuando se dirigen al público opinan de manera distinta




Alberto Joven

info@albertojoven.com
ajoven@seikoasesores.es

Twitter: @alberjv

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