¿Y tú que quieres ser de mayor?
Joder que pregunta ... ¿verdad? Con casi 45 "tacos" que tengo ya... lo podía ir teniendo claro. Pero... ¿sabes que pasa? Que lo que no tengo claro es cuando uno es "mayor". Hombre, yo por el vacile de turno, siempre seré joven... aunque sea de apellido.
La verdad, que este no es un post ni de opinión, ni de información, ni siquiera una reflexión... esto va de escribir, de sentir, de aprender, de pensar, de ayudar... esto va de la vida... si, de esa Montaña Rusa de la Vida que hace un tiempo escribí en este blog.
¿Qué por qué he empezado con esa pregunta?
Sencillo... hay una persona, un amigo, un tío de arriba abajo con el que muchos (todos) días he hablado, y no siempre de su profesión ni de la mía, sino de la vida, del esfuerzo, del sacrificio, de la lucha, del éxito... y ¡¡que cojones!! también de tirar la toalla, qué todo no es bonito ni siempre el agua del río baja cristalina. Ese tío, se llama Imanol Sánchez y no lo voy a describir aquí como torero, ni como profesional de su mundo, en primer lugar, porque no debo ni estoy capacitado para ello bajo mi modesta opinión. Quiero hablar de ese Imanol que día a día se levanta sin un contrato pero con un motivo, sin una fecha pero con un mundo, sin un destino pero con una ilusión... esa persona que junto a otros amigos, y es justo nombrarlos, como Jorge Gutierrez o David Asensio creamos... ¿Y tú que quieres ser de mayor?
Y de repente, llega el día, llega esa fecha, de repente eres mayor... de repente cumples esa ilusión. Cierto es, que jamás había saboreado ni sentido la cercanía de una fecha así, y cierto es también, que un cúmulo de sentimientos recorren mi cuerpo, mi mente. Nos hemos subido a un escenario, hemos hablado con niños, hemos presentado libros, hemos hablado en radio... pero, colega, el día 8 te juegas la vida, y lejos de estar preocupado por eso... lo estoy porque esa vida que te juegas sea justa contigo, con tu trabajo, con tu esfuerzo, con esas llamadas, esos whatsapp de madrugada levantándote a entrenar... con ánimo, sin ánimo, con ganas, sin ganas.... pero siempre ahí. Y es que... amigo... ya eres mayor. Lo que nos preguntábamos hace unos días cómo sería... ya está aquí. Sin duda alguna, lo más positivo, es que estás preparado para ello.
Insisto, en que mi capacidad y sapiencia taurina no está lista para tildarte como un profesional de un modo u otro, pero si estoy sobradamente preparado para saber todo lo que te ha costado llegar a ese 8 de octubre, y mi reconocimiento, lo tienes y tendrás para toda la vida.
Ya eres mayor, ya somos mayores... pero seguro seguro... que después de ese día 8, seguiremos teniendo ilusiones, y lo más importante, las seguiremos compartiendo.
Va por ti, maestro y amigo. De todo corazón.
P.D. Ah, que se me olvidaba... como diría un buen amigo nuestro... de los buenos, buenos, "siempre de frente y por derecho", y ese, siempre será Joven también.
Alberto Joven
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