Lucha e Ilusión dos palabras que en muchos casos pueden ser una paradoja para el año que vamos a cerrar. Pero, ¿qué sería la vida sin ilusión?
Para los que tenemos hijos, por lo general, ellos son el motor que nos genera la gasolina de poder seguir hacia adelante. Pero... no solo ellos, si no todos aquellos que están a nuestro lado, bien día tras día, o bien en momentos puntuales. Lucha e Ilusión como estado, son conceptos sin los cuales, será difícil poner los pies en el suelo con una sonrisa al día siguiente.
Creo que en otros post, en otros años, ya habéis podido leer que la Navidad, no es una época del año que me guste especialmente, pero que si, como deberían hacer otros en otras situaciones de la vida, lo respeto. Lo respeto al máximo.
No quería alargarme mucho. Este año ha sido distinto. Un 2020 con más sombras que luces, con más llantos que sonrisas, pero que no nos debe sumir en la tristeza, y mucho menos, en una bajada de brazos permanente. Echo la vista atrás, y mi 2020, tiene momentos que me permiten sentirme orgulloso, y que esos momentos negativos queden en el olvido.
Luchar, esforzar, soñar, reír, ilusionar... son palabras que debemos tener siempre en nuestra mente y en nuestro bolsillo. Nunca sabes cuando las vas a utilizar, y son la mejor arma para hacer frente a momentos como el que vivimos.
Ójala todos los que estáis leyendo estas líneas, al año que viene, podáis disfrutar a vuestro lado de todos aquellos de los que hoy, por una causa u otra, no podéis abrazar.
Y vuelvo a la frase de mi postal navideña. Yo, la lucha, nunca la dejé, y la ilusión la llevo en el bolsillo, asi que... recuerda "Solo tú..."
Feliz Navidad, de corazón
Alberto Joven
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